sábado, 5 de julio de 2008

Agujero negro rural

Me pregunto para qué serviría este agujero en la pared. Lo encontré en la fachada de una casa rural, unos pueblos más allá de donde vivo.
No parece una cañería salvajemente deformada por vandalismos callejeros.
Tampoco pasó por aquí toro alguno. Digo, a no ser que fuera capaz de saltar y acertar de costado a doblar los hierros. Esto resulta ciertamente difícil, ya que estaban a una altura del suelo bastante más que respetable...
De lo que sí estoy segura es de que tampoco era una escultura.
Quizá una demostración más de que las cosas pequeñas, ordinarias, tienen también su encanto.
Hasta la próxima.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola!
la verdad que estoy totalmente de acuerdo, a veces es solo de abrir más los ojos y mirar con atención y uno encuentra cosas bonitas!

un abrazo!
Maribel

yo diria que parece una araña bailando flamenco