sábado, 25 de mayo de 2013

Hendaya visto y no visto

Un surfista aventurero
   De Fuenterrabía pasamos a Hendaya, pero no en barquito como teníamos previsto, pues el chubasquero del chino calaba. Por un euro no esperaba más.
 
  En el horizonte cercano tan sólo surfistas. Y El Gran Casino, que accedió a acogernos con nuestros bocadillos si comprábamos allí bebida y café. No faltaba más... Nos asombró la calurosa acogida, con el frio reinante en el exterior. Pero más aún el canario que tenían en una jaula abierta: se daba largos paseos por toda la zona de la barra del bar, picoteando comida de su tazón de cereales.


Es "super-canario"

Pelín malcriado, pues en la jaula tomaba de vez en cuando como postre una ración de tarta al mousse du chocolat de una pinta opípara. Así estaba el pobre, que más parece una paloma amarilla. Accedió a salir en la foto, bajo la mirada amorosa de su propietario y de otro cliente que decía conocerlo de toda la vida. 
  Vivir para ver...


miércoles, 22 de mayo de 2013

Fuenterrabía a toda velocidad


   He hecho el propósito de no hablar más de la lluvia. Pero si mi visita a esta bonita localidad guipuzcoana fue breve, y asaben el motivo. De allí pasé a Francia, donde las nubes eran igual de grises aunque hablaran en francés.
  Frente al Parador de Carlos V me topé con este bonito agujero en la ventana de una casa. Me encantan las texturas, como puede apreciarse.
  El muelle, con su reflejo, también me pareció atractivo.
 

Caían chuzos de punta y las cañerías estaban pensadas para no mojar al peatón, pues caen al centro mismo de la calzada. Sólo que salpican...
  De camino hacia un rico pincho en lo viejo vi este reflejo en la plaza y pensé que cualquier día lo pintaba.
  Si cambia el tiempo prometo no hablar más de la lluvia. De verdad.

lunes, 20 de mayo de 2013

Cuadros recientes con acrílicos


Ermita de San Telmo en Zumaya
  Lo bueno de estar de vacaciones en días de lluvia es que apetece muchísimo pintar... Así que, cuando me encontré una foto de Zumaya sacada hace algunos años, me lancé a toda velocidad al tablero. ¿Resultado? el que se ve a la derecha.
  Me hizo gracia que, al pintar sobre una tabla imprimada por mi padre -con su textura rugosa, con sus ligeras humedades del garaje-, me encontré con que las mezclas de colores salieron muy similares a las que él utilizaba.

Por otra parte hice varios estudios de lo que quiero pintar el día del concurso, si es que no se anula por el mal tiempo. Y es  una caseta que hay en un campo junto a Olza, que siempre me enamora. Debe de ser de aperos, por lo pequeña, pero estaba ahora en un entorno de trigo, cebada y colza que componía un paisaje brillante de color. Y eso es lo que, Dios mediante, espero plasmar en el lienzo.

Me dicen que el dueño quiere cortar los árboles que la rodean, pues deben dificultar su trabajo. Creo que perdería toda la gracia el paisaje. No creo que me lea, así que veremos en qué termina todo. Un saludo.


lunes, 13 de mayo de 2013

Siempre hay esperanza

  Cuando encuentro una corteza rugosa en la que "brotan-brotes" nuevos, me da siempre gran alegría. Y siempre viene el mismo pensamiento, quizá cursi y hortera -qué le voy a hacer-, pero animante: Si de "aquí" puede salir algo bueno, joven y lleno de vida, ¿por qué no habría de ocurrir en mí? No me refiero a la literalidad de la vegetación, sino a la posibilidad de recomenzar siempre.
  Conste que me admira más en árboles con cientos de años, pero de esos no tengo a mano fotografía. Haberlos "haylos".
  Por muy anquilosado que esté uno por dentro, por muy "madero", siempre hay esperanza.

Como diría Charlot: "Spring is coming..."


viernes, 10 de mayo de 2013

El Desolado de Peña

Vista acercándose por el camino largo.
 Hizo un día de perros. Digo yo que qué tendrán que ver los perros con la lluvia y el frio, pero en fin.

 Recordaba el famoso pueblo de una excursión hace años, en la que hice una fotografía al atardecer y las casas brillaban amarillas con aspecto tenebroso.

  Esta vez fue todo más normal: era primavera, aunque sólo se notase en las flores.

  En la primera  foto  se aprecia parte del antiguo castillo que levantó en el siglo XI el rey Sancho el Mayor. Nada aparentemente más inexpugnable. Aunque ya se ve que el tiempo puede con todo...

Una iglesia del siglo XII reconstruida y otro edificio a su lado que, por el sonido del interior, creí habitada por pájaros. Tenía una ventana abierta.

Sin embargo a la hora del bocadillo se presentaron dos excursionistas que venían del cementerio (estaban vivos, ¿eh?) y, después de saludar, se metieron en la casa a almorzar.  

Del cementerio se cuenta que está allí enterrado el  piloto de un avión inglés que, tocado por los nazis cerca de Toulouse, llegó hasta Peña y cayó junto con la nave al engancharse su paracaidas a la cola. Por lo visto los lugareños procedían en ese momento a procesionar desde la iglesia y lo vieron todo...  El copiloto sobrevivió al lanzarse del  avión sobre Sos del Rey Católico, muy cerca de la zona.

Los excursionistas habían ido a ver la tumba de Mr. Walter, pero tuvieron que saltar una valla, así que ni se nos ocurrió dar ese paseo extra para jugarnos el pellejo. O la tela del chubasquero, ¡qué más da!

miércoles, 8 de mayo de 2013

Otro árbol hambriento

 De excursión por Navarra hacia el Desolado de la Peña, un pueblo deshabitado de aspecto fantasmagórico, con historia para dar y contar, me topé con el segundo árbol devorador de señales.

 Saqué bonito perfil a cierta distancia, por si las moscas, y me uní pitando al grupo de excursionistas.


No se aprecian los dientes, pero quién sabe...

jueves, 2 de mayo de 2013

Una solución a tantos problemas...

Me he encontrado este vídeo, he reconocido la voz de quien dobla a Gandalf y, sobre todo, me ha gustado el mensaje. Ya se ve que hay que poner todos los medios.

miércoles, 1 de mayo de 2013

Concurso de pintura

Ya he vuelto a apuntarme al próximo concurso de pintura al aire libre. A ver si este año consigo compañía porque, aunque es ocasión estupenda de conocer artistas menos amateurs que yo, resulta un tanto complicado el traslado del material, lienzo, etc... hasta el punto elegido. Menos mal que tengo mi carrito de la compra color Orange...

Si no encuentras a nadie, mmm...


Retoqué el del año pasado y lo doy por acabado, que no por bueno...