jueves, 20 de mayo de 2010

Desafío angular


En algún momento de este verano inminente espero encontrar hueco para practicar el dibujo, ahora que en todos los periódicos recuerdan lo malo malísimo que es para la piel ponerse moreno. O sea, que hay que buscar otros objetivos disuasorios, siempre que uno logre producir un mínimo de vitamina D paseando a diario al sol -qué suerte-.

Vale, pues entonces nada como buscar detalles interesantes. Esta foto muestra un combinado de ángulos y perspectivas que me llevaría una eternidad dibujar. Quiero decir dibujando 'al natural'. Bonito reto.
Para muestra de que la madre naturaleza "fabrica" cosas no menos complicadas, allá va también la foto de un pino de cierto abolengo.
Me recuerda las señales indicadoras de dirección en las ciudades inglesas: puede llevarte cosa de una hora leer todos los carteles que colocan en una barra vertical...
Pobre árbol, ¡lo que le costará desenredarse la melena por las mañanas!
Mientras tanto, aquí estamos acabando el curso académico gracias a Bolonia y sobreviviendo a los caprichos de la metereología, que se empeña en matarnos con su actitud tan inestable. Si no lo logra, algo harán las gramíneas para incordiar a los supervivientes. Chao!

No hay comentarios: