Parece la célebre película de Hitchcock, pero no, se trata más bien del tema de los post-it gigantes que un ayuntamiento (imagino que ha sido él) ha ido colocando por todos los parques, en edición bilingüe. Por fin topé con uno inteligible para mí. No se trataba de una campaña publicitaria del tipo 'no sé qué anuncian para al final ¡ah era eso!'. En su simplicidad rezaba: "recuerda que la caca de tu perro no es abono".
He tenido perro, pero hace muchos años. De todas formas ya se ve que no acaba uno de aprender. Menos mal que hay carteles.
Y me digo, cierto que el pisar un excremento por la calle, al bajar del coche o al cruzar un trozo de "pradera" causa una sensación bien poco gratificante.
Pero me pregunto en mi ignorancia, y disculpen la naturaleza del tema, por qué la caca de caballo o de vaca sirve para abonar y no así la del perro. Y que conste que me disgusta comenzar el año un tema tan banal.
Un cartel que encontré en las farolas de Glasgow hace años, llamando de forma más convincente a la positiva acción cívica de recoger tales desechos, sin limitarse a recordatorios, decía más o menos:
Your dog did it? Bag it! Bin it! O sea, simplemente utiliza una bolsa si tu can hizo sus necesidades y échalo a la basura. En qué color de contenedor, ya no sabría precisar.
jueves, 3 de enero de 2013
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