Como no se estila lo de coger imágenes de otros autores y, habida cuenta de la limitación de mis recursos, procederé a mostrar en entradas sucesivas lo que buenamente pueda conseguir con la cámara que utilizo.
Cerezos en flor, rigurosamente puntuales, desde el paseo que baja a lo largo de Fuente del Hierro, camino transitado por estudiantes y, en todas las fechas del año, por peregrinos que realizan el Camino de Santiago en los medios de locomoción más variados: a pie, en bicicleta, en burro y... hasta en camello. De éste último no tengo imagen, pero como nos decía el profesor de un curso de fotografía hace años: " la mejor fotografía es la que no se hace". Pues es un instante, una luz, un algo...
Desde entonces acostumbro a tener a mano la cámara, pero es cierto que se me han quedado muy buenas fotografías en el tintero del instante.
Aproximándose al puente románico, junto al crucero, me topé con este tapiz verde y rojo y hasta amarillo de un árbol que no sabía cómo reaccionar a las heladas repentinas, al calor y el agua. Realmente el tiempo está loco.
El color de sus hojas hubiera entusiasmado a alguien a quien quiero mucho, que habría formado un ramillete multicolor en un par de segundos.
Y, por último, una imagen "pequeñica" -como dicen aquí- del crucero. Espero poder poner más adelante alguna mejor, pero no estaba la luz para más detalles...
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